martes, 16 de diciembre de 2008

Rompiendo las Sandalias




Sí, de acuerdo, las estaciones en principio deberían ser cuatro, todos lo sabemos. Pero es que para mí, porque me apetece, y porque yo lo valgo, el año se divide en dos temporadas: temporada de sandalias y temporada sin sandalias.Algunos ya conocéis mi gran atracción por el calzado. Pero esta atracción es especialmente fuerte hacia las sandalias. Me encanta llevar los pies al aire, y caminar sin ataduras ni protecciones alrededor de ellos.Así que como por Bilbao han empezado ya a llegar los calores, el sábado inauguré la temporada de sandalias.